En el Miguel de Molinos se habla Latín. Desde su alma mater allá por el s. XVII hasta hoy parece que no lo hemos perdido, aunque se piense de nosotros que somos rara avis. Así a priori quizás no se percibe, pero el castellano se arraiga en el latín in saecula saeculorum, desde su fonética, léxico, gramática...et cetera.
Los alumnos que estudian latín lo captan ipso facto, de manera que la mayoría logran reconducir el totum revolutum que para ellos supone el estudio de las lenguas, llegan al quid de la comprensión lingüística in crescendo por el via crucis de los textos clásicos. Lo sorprendente es que en el interim disfrutan, porque el conocimiento es descubrimiento y motivar la curiosidad por el mundo clásico es conditio sine qua non para conseguir el ya tan clásico lema de Horacio: docere delectando.
Post data : no dejéis de tener in mente pasar a ver la exposición para seguir leyendo latinajos.
GRACIAS A TODOS LOS ALUMNOS QUE CURSAN LATÍN Y GRIEGO POR SU COLABORACIÓN Y AYUDARNOS A SEGUIR ENSEÑANDO.
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